A partir del 24 de Septiembre de 2020, todos los edificios que soliciten licencia de obras en España, tanto de nueva edificación como de rehabilitación, deberán cumplir con la normativa de los edificios de consumo de energía Casi Nulo.
Pero ¿cuál es la diferencia entre esos edificios y los que se construyen con la certificación energética PASSIVHAUS?.
Si bien el estándar Passivhaus ha sido tomado como referencia en la definición de estos nuevos “Edificios de Consumo Casi Nulo” en varios países europeos, sigue sin ser equivalente: existen todavía diferencias muy significativas en los requisitos a cumplir si un edificio aspira a conseguir el Certificado Passivhaus.
En este artículo explicaremos por qué el estándar alemán supera con mucho las exigencias del nuevo CÓDIGO TECNICO DE LA EDIFICIACIÓN (en adelante CTE) que se aprobó en España en diciembre de 2019, como consecuencia de una directiva europea, que pretende la disminución de la energía consumida en los edificios.
Para entender mejor qué significa todo esto, lo mejor es ver cuales serían las diferencias entre un edificio Certificado Passivhaus y uno hecho para cumplir la nueva normativa CTE 2019 en un clima concreto: por ejemplo, en Madrid o en Zaragoza.
Ambas ciudades pertenecen a la zona D3 en la clasificación climática que establece CTE.
1. La envolvente térmica
En primer lugar, vamos a fijarnos en la envolvente térmica, en el abrigo del edificio. Esta envolvente térmica está formada por los muros, los suelos, las cubiertas y por último – pero no menos importante – las ventanas.
Normalmente las ventanas son los puntos más débiles de la envolvente del edificio, pues son las superficies por donde nos entra más frío en invierno o calor en verano.
Comparando la calidad de la envolvente en un edificio Certificado Passivhaus con el límite que establece CTE 2019, vemos que las VENTANAS certificadas Passivhaus tienen una transmitancia térmica un 50% menor, las CUBIERTAS necesitan tener un 40% menos de transmitancia y las FACHADAS transmiten un 50% de energía menos que las de un edificio que cumpla estrictamente la exigencia de CTE 2019.
Hemos de recordar que esta mejora es muy importante no solo en invierno, también en verano.
2. Los puentes térmicos
En cuanto al tratamiento de puentes térmicos, adjuntamos una tabla explicativa sobre los requerimientos y exigencias del CTE, mientras que los del estándar PASSIVHAUS son muy SUPERIORES.
3. La hermeticidad al aire
Para garantizar la HERMETICIDAD DEL AIRE, en el estándar PASSIVHAUS se requiere un test que demuestre que las infiltraciones de aire son sólo 0,6 renovaciones/hora, lo que significa 5 veces menos que la estimación sobre papel que permite CTE 2019. La principal diferencia es que para obtener el Certificado Passivhaus es obligatorio un test BLOWERDOOR en obra, que garantiza la efectividad del tratamiento de la estanqueidad al aire del edificio.
4. La ventilación
Para garantizar una buena calidad del aire interior, la ventilación es esencial. En la VENTILACIÓN DE LAS VIVIENDAS, el CTE todavía permite ventilar mediante microventilación en las ventanas más la extracción por zonas húmedas.
Sin embargo, en el estándar PASSIVHAUS, la ventilación se soluciona con un sistema de ventilación continua con RECUPERADOR DE CALOR, que pasa una prueba en obra de EQUILIBRADO obligatoria, lo cual también es una garantía de efectividad y buen funcionamiento del sistema.